Francia, España e Italia sufren olas prematuras de calor con incendios y sequías
Francia sufre una ola de calor récord antes del verano, con picos de alrededor de 40 grados, al igual que en la vecina España, que ya lleva varios días de sofocantes temperaturas que también agravan la sequía en el norte de Italia.
El servicio meteorológico Météo France advirtió que se trata de la ola de calor más temprana desde 2005. Las altas temperaturas agravan el riesgo de incendios forestales, como los registrados en España, que ya vivió el mes de mayo más caluroso desde principios de este siglo.
España enfrenta ahora temperaturas de hasta 43 grados centígrados y no se espera que haya un alivio antes del domingo, según el servicio meteorológico Aemet.
Al menos tres incendios se declararon en Cataluña (noreste de España). El más preocupante en Baldomar, donde el fuego quemó 500 hectáreas y puede alcanzar las 20.000, según el gobierno regional.
Por el momento no hay personas evacuadas en esta zona de la provincia de Lérida, pero las autoridades confinaron algunas áreas pobladas cercanas como medida de precaución.
En la vecina Portugal, el mes pasado fue el mayo más caluroso desde 1931. La mayoría de científicos lo atribuyen al calentamiento global causado por los gases de efecto invernadero.
En el norte Italia, las autoridades ya racionalizaron el agua en algunas ciudades de la llanura Padana y la región de Lombardía se preparaba para declarar el estado de urgencia por una sequía récord que amenaza las cosechas.
El valle del Po, que atraviesa el norte del país muy agrícola, enfrenta su peor sequía en 70 años. En algunas zonas, no ha llovido desde hace más de 110 días, según el Observatorio del río Po, la mayor reserva de agua de la península.
En Francia, el servicio meteorológico había anunciado temperaturas de 34 a 38 grados para este jueves, pero había advertido que algunas localidades podían alcanzar los 40 grados, como ocurrió en la tarde en Saint-Jean-de-Minervois, en el sureste del país.
Se prevé que el calor golpee a la mayor parte del país el sábado, cuando los termómetros podrían alcanzar los 38 grados en París. Las autoridades advirtieron del aumento del riesgo de incendios en los bosques que rodean la capital y otras zonas, ante lo que se emitieron alertas.
"Tengo 86 años y nací aquí. Pero pienso que es la peor ola de calor que nunca he visto", aseguró a la AFP Jacqueline Bonnaud, en un parque de la ciudad de Toulouse (sur).
- Electricidad y trenes, afectados -
El aumento del uso del aire acondicionado y ventiladores obligó a Francia a importar electricidad de países vecinos, dijo este jueves el operador RTE, cuando muchos reactores nucleares están fuera de servicio por problemas de corrosión o por mantenimiento.
El intenso calor también redujo el caudal de los ríos, por lo que algunas centrales nucleares deben reducir la producción porque el agua utilizada para la refrigeración de los reactores está demasiado caliente para ser devuelta a los cursos de agua sin poner en peligro la flora y la fauna.
España, Italia y otros países han limitado recientemente el uso de los aires acondicionados para ahorrar energía y la ministra francesa del ramo, Agnès Pannier-Runacher, declaró a la cadena France 2 que estudiaba una medida similar.
En Francia, la ola de calor afecta a la vida cotidiana. Los colegios se abastecieron de agua y, en el sur, algunos cancelarán el viernes las clases.
La empresa de ferrocarriles SNCF advirtió de posibles retrasos, ya que los trenes se ven obligados a reducir la velocidad porque el calor deforma las vías y daña los equipos eléctricos.
"Nuestra infraestructura sufre" con el calor, dijo el director regional de la SNCF, Thierry Rose, señalando que las temperaturas a nivel de las vías en Burdeos (suroeste) alcanzaron los 52 grados el miércoles.
A. Williams--BTZ