Embajador de EEUU dice que estrategia contra el crimen de México "no funcionó"
La estrategia de seguridad impulsada por el gobierno mexicano para combatir la criminalidad no ha funcionado, dijo este miércoles el embajador estadounidense en México, Ken Salazar.
"La estrategia de "abrazos, no balazos" no funcionó", dijo el diplomático en una conferencia de prensa en la que fue interrogado sobre los esfuerzos de la presidenta mexicana, la izquierdista Claudia Sheinbaum, y de su correligionario predecesor, Andrés Manuel López Obrador, de priorizar la prevención de causas de la criminalidad, como la pobreza, en vez de combatirla de manera frontal con represión.
En el marco de esa estrategia lanzada por López Obrador (2018-2024), el gobierno otorga apoyos económicos, becas y puestos de trabajo a jóvenes con el objetivo de evitar que sigan el camino delictivo.
"La parte del concepto que tiene validez es la prevención", apelando a programas "que apoyamos muchísimos de nosotros" en Estados Unidos, comentó el embajador, al citar como ejemplo programas de apoyo a las comunidades locales.
"Por otro lado está el cumplir con la ley (...) no podemos decir tenemos estas cifras de que no hay problemas'" de criminalidad en México, añadió Salazar en referencia a estatísticas oficiales según las cuales la violencia está a la baja.
Sheinbaum, quien asumió el 1° de octubre y fue la candidata impulsada por López Obrador, sostuvo que mantendrá la misma línea, pero ordenará reforzar también las tareas de inteligencia y la coordinación con las fiscalías del ámbito federal y de los estados.
Salazar dijo además que López Obrador "cerró la puerta" a la colaboración con Estados Unidos para la seguridad, dejando de recibir unos 32 millones de dólares.
"La verdad es que hay un problema muy grande en México", dijo al evocar el asesinato, en octubre, de un sacerdote en el estado de Chiapas (sur) y la violencia en el de Sinaloa (noroeste).
Se refirió además al problema de la "corrupción" en el sistema judicial mexicano y cuestionó que la reciente reforma constitucional del sector aprobada por el gobierno izquierdista realmente sea la solución.
La nueva ley establece que los jueces y magistrados serán electos por voto popular, sistema único en el mundo y que ya había sido criticado por Salazar.
Esto le valió al embajador una nota diplomática de protesta por parte de la cancillería mexicana y que López Obrador declarara una "pausa" en su contacto con el diplomático.
K. Berger--BTZ