La Comisión Europea se apresta a mostrar su nuevo rostro
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, debe presentar esta semana la conformación del Colegio de Comisarios europeos, al cabo de intensas disputas por la ambiciosa meta de paridad de género.
El Colegio de Comisarios representa una especie de gabinete en el poder ejecutivo del bloque, y está constituido por la propia Von der Leyen, en representación de Alemania, y un comisario o comisaria europea por cada uno de los restantes 26 países del bloque.
Así, el Colegio es el resultado de un complejo rompecabezas, en cuya definición se consideran intereses geográficos (el peso de los respectivos países), la familia política de los aspirantes y la paridad de género.
Al ser reelecta para un segundo mandato al frente de la Comisión Europea, Von der Leyen pidió a los países que le envíen dos nombres, un hombre y una mujer, para alcanzar la paridad de género.
Sin embargo, solamente Bulgaria cumplió con el pedido, y el número de aspirantes femeninas presentado por los países en este 2024 indican que el nuevo Colegio tendrá menos mujeres que la Comisión que termina su mandato.
Para el nuevo Colegio está confirmado el nombre de Von der Leyen, como presidenta, al tiempo que la exprimera ministra de Estonia, Kaja Kallas, deber ser confirmada por el Parlamento Europeo como jefa de la diplomacia del bloque.
Además, Bélgica, Bulgaria, Croacia, Finlandia, Portugal, Rumania, España y Suecia presentaron candidatas mujeres, para un total de 10, (o "dos dígitos", como destacó Von der Leyen la semana pasada).
En tanto, el Colegio de Comisarios saliente incluye a 12 mujeres y 15 hombres.
- Dificultades políticas -
Más allá de la paridad de género, Von der Leyen tiene la difícil tarea de distribuir cargos en forma de dejar satisfechos a todos.
El nuevo Colegio de Comisarios debe reflejar de forma equilibrada el resultado de las elecciones europeas que se celebraron en junio.
El miércoles, Von der Leyen tiene en agenda una reunión con los líderes del Parlamento Europeo, y deberá anunciar una conferencia de prensa en esa misma jornada o quizás más adelante en la semana.
Durante la semana pasada, un periódico alemán afirmó que en la distribución de los cargos el representante de Italia, Raffaele Fitto, de derecha, quedaría al frente de la Economía, una idea que provocó un intenso revuelo en las capitales europeas.
La eurodiputada liberal francesa Valerie Hayer dijo que la distribución de cargos tal como circula en medio de rumores es "insostenible".
En ese escenario, resta ver la reacción del Parlamento Europeo, que deberá someter a interrogatorio a los aspirantes y someter sus nombres voto para su confirmación o rechazo.
Más allá de Fitto, se verifican resistencias también con relación al candidato de Hungría, Oliver Varhelyi, actual comisario europeo de Ampliación, por las tensas relaciones entre Bruselas y Budapest.
Los persistentes rumores también sugieren que la actual vicepresidenta del gobierno de España y candidata por ese país, Teresa Ribera, quedaría como comisaria de Transición Digital y Verde.
En tanto, las versiones sitúan a la candidata de Portugal, Maria Luis Albuquerque, como Comisaria europea de Presupuesto.
En este escenario, la posibilidad de que la nueva Comisión a pleno comience sus trabajos el 1 de noviembre es vista como cada vez más distante, ya que todo el proceso podría retrasarse un mes, hasta diciembre.
S. Soerensen--BTZ