Blinken presiona a Hamás para que acepte una propuesta de tregua en Gaza
El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, pidió el martes a Hamás que acepte la última proposición estadounidense de tregua en la franja Gaza, y afirmó que el tiempo se agota tras más de diez meses de guerra con Israel en el territorio palestino.
Blinken, que llegó el martes a Catar tras su paso por Israel y Egipto, aseguró a los periodistas antes de su salida del aeropuerto de Doha que el tiempo "apremia" para lograr un alto el fuego.
Agregó que Estados Unidos se opone a una ocupación israelí "a largo plazo" de Gaza.
El ejército israelí anunció el martes que recuperó en la Franja los cuerpos de seis rehenes secuestrados el 7 de octubre en el sur del país, durante el ataque de los milicianos islamistas que desencadenó la guerra.
En las últimas semanas, Israel y Hamás se han acusado mutuamente de bloquear un acuerdo de alto el fuego y de canje de rehenes en manos del grupo por presos palestinos en Israel, para poner fin a una guerra que ha dejado decenas de miles de muertos en el territorio palestino.
Blinken, que realizaba su novena gira regional desde el inicio de la guerra, se entrevistó en Doha con el ministro de Estado de Catar, Mohammed bin Abdelaziz al-Kulaifi, sin ver al emir Tamim Bin Hamad al Thani, como estaba previsto.
Previamente se había reunido en la ciudad egipcia de El Alamein con el presidente de ese país, Abdel Fatah al Sisi, quien abogó por un "alto el fuego en Gaza".
- "Luz verde" de Estados Unidos -
El lunes, tras las citas que mantuvo en Israel, el secretario de Estado estimó que se trata "quizás de la última oportunidad de traer a casa a los rehenes" y "de obtener un alto el fuego".
Según Blinken, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, le "confirmó" que su gobierno "acepta el plan de acuerdo" para una tregua presentado por Washington e instó a Hamás a "hacer lo mismo".
El presidente estadounidense, Joe Biden, acusó al movimiento islamista palestino de "distanciarse" de las negociaciones.
Hamás replicó que esas declaraciones "no reflejan la real posición del movimiento, que desea alcanzar un acuerdo de alto el fuego", y dan en cambio la "luz verde estadounidense" para que Israel prosiga la guerra.
El viernes, tras dos días de discusiones en Doha entre los negociadores israelíes y los países mediadores -Estados Unidos, Catar y Egipto-, Washington presentó una nueva propuesta de pacto, que Hamás rechazó.
El grupo palestino acusó a Washington de haber incluido "nuevas condiciones" de Israel en el plan presentado por Biden a fines de mayo.
Esas "nuevas condiciones" se refieren principalmente al mantenimiento de tropas israelíes en la frontera de Gaza con Egipto y a "un derecho de veto" sobre la inclusión de ciertos presos palestinos que pueden ser canjeados por rehenes en manos de Hamás.
- "Finalizar el acuerdo" -
Netanyahu, en declaraciones reportadas por familiares de rehenes secuestrados por Hamás, afirmó que Israel insistirá en mantener el control del Corredor Filadelfia, como se denomina la banda fronteriza que separa Gaza de Egipto.
Esas declaraciones fueron criticadas por un funcionario de la comitiva de Blinken.
"Declaraciones maximalistas como esas no son constructivas para alcanzar un acuerdo de alto el fuego", apuntó.
El gobierno israelí también recibe presiones del Foro de Familias de Rehenes, que le instó a "hacer cuanto esté en su mano para finalizar el acuerdo que hay sobre la mesa".
Hamás aceptó en julio el plan presentado por Biden en mayo y exige su aplicación estricta.
Esa iniciativa prevé, en una primera fase, seis semanas de tregua en las que las tropas israelíes se retirarían de las zonas densamente pobladas de Gaza y en las que se liberaría a una parte de los rehenes secuestrados el 7 de octubre.
En una segunda fase, las tropas israelíes se retirarían totalmente de la Franja.
- Bombardeo en una escuela -
Netanyahu insiste en continuar la guerra hasta la destrucción de Hamás, en el poder en Gaza desde 2007.
En su ataque del 7 de octubre, los milicianos islamistas mataron a 1.199 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a 251 en el sur de Israel, según un cómputo de la AFP basado en datos oficiales israelíes.
Del total de secuestrados, 105 siguen en Gaza, aunque 34 de ellos han sido declarados muertos por el ejército israelí.
La ofensiva israelí en Gaza ha dejado al menos 40.173 muertos, según el Ministerio de Salud del territorio palestino.
Los bombardeos israelíes prosiguen sin descanso en ese enclave, donde la casi totalidad de sus 2,4 millones de habitantes han sido desplazados.
La Defensa Civil gazatí anunció el martes que al menos 12 palestinos murieron en un bombardeo de una escuela de Ciudad de Gaza, donde se refugiaban. Según el ejército israelí, en el establecimiento había "terroristas escondidos".
Además, seis personas murieron en un ataque del ejército israelí en Rafah, en el sur del enclave, según fuentes médicas.
Para Estados Unidos, una tregua en Gaza ayudaría a evitar un posible ataque de Irán y sus aliados -el movimiento libanés Hezbolá, Hamás y los rebeldes hutíes- contra Israel.
La República Islámica de Irán amenazó a Israel tras los asesinatos del líder de Hamás, Ismail Haniyeh, y del jefe militar del movimiento libanés Hezbolá.
El frente más preocupante es la frontera con Líbano, con hostilidades casi diarias entre los soldados israelíes y los combatientes de Hezbolá.
El miércoles de madrugada, el Ministerio de Salud libanés informó de un muerto y 19 heridos por bombardeos israelíes en el valle de la Becá, en el este del país.
H. Müller--BTZ