Una empresa alemana de alimentos admite que utilizó mas trabajo esclavo que lo pensado durante el nazismo
El fabricante alemán de galletitas Bahlsen utilizó durante el nazismo a muchos más trabajadores forzados, provenientes de Polonia y Ucrania, de lo que se sabía hasta ahora, según un estudio encargado por la empresa, que ha hecho su mea culpa.
Cerca de 800 trabajadores forzados fueron identificados entre 1940 y 1945 en la empresa de Hanóver, según este estudio realizado por dos historiadores, Manfred Grieger y Hartmut Berghoff, quienes llevaron a cabo sus investigaciones a petición de la familia Bahlsen, informó la compañía el jueves.
El número es mucho más alto que una estimación anterior de 200 a 250 trabajadores forzados.
"La verdad sobre lo que sucedió en esa época (nazi) es incómoda y dolorosa", comentó la familia Bahlsen en un comunicado de prensa.
El estudio "muestra que nuestros antepasados y los actores de la época se beneficiaron del sistema durante el período nazi", añade el comunicado de la empresa familiar fundada a finales del siglo XIX.
Los trabajadores forzados fueron empleados para producir raciones alimenticias para el ejército alemán.
Los herederos de Bahlsen afirmaron que hasta ahora no conocían muchos detalles sobre la historia de la empresa y que nunca se habían preguntado cómo pudo operar y sobrevivir durante la Segunda Guerra Mundial.
Este estudio fue encargado después de que una joven heredera de la empresa, Verena Bahlsen, provocara una polémica en mayo de 2019 al minimizar públicamente los sufrimientos de los trabajadores forzados empleados por la empresa durante la época nazi.
H. Müller--BTZ