Nueve fallecidos por Beryl, que se degrada a tormenta tropical en Texas
La cifra de muertos a causa del Beryl se elevó a nueve tras el fallecimiento de dos personas el lunes por la caída de árboles en Texas, donde entró como huracán, causando inundaciones y destrozos, pero se degradó a tormenta tropical.
"Un árbol cayó sobre una casa y un hombre quedó atrapado bajo los escombros. (...) Se ha confirmado el fallecimiento de una persona", informo Ed González, sheriff del condado de Harris, jurisdicción a donde pertenece Houston. El hombre de 53 años falleció pero su esposa y sus hijos se salvaron.
En otro incidente, "un árbol cayó sobre una residencia, golpeando a una mujer de 74 años. Fue declarada fallecida en el lugar", informó el sheriff.
El lunes, Houston recibió lluvias intensas y ráfagas de viento. Múltiples inundaciones se registraban a lo largo de la ciudad, según imágenes difundidas por las autoridades y los medios locales.
Fotos de árboles caídos sobre vehículos, vías inundadas con autos atrapados y destrozos eran compartidas por las autoridades en la red social X.
Al menos un conductor que quedó atrapado con su vehículo en una vía inundada en Houston fue rescatado.
"Marejadas ciclónicas que amenazan la vida, ráfagas de viento e inundaciones y lluvia continúan sobre el este de Texas", alertó este lunes el estadounidense Centro Nacional de Huracanes (NHC).
Se emitieron alertas de tornado para sectores de Texas, Arkansas y Lousiana.
A su paso por el Caribe la semana pasada el fenómeno ya había ocasionado otras siete víctimas: tres en Granada, donde tocó tierra el lunes; uno en San Vicente y las Granadinas y tres en Venezuela.
-Pierde fuerza-
Baryl, que en sus inicios hace una semana llegó a ser un potente huracán con vientos de 250 km/h, se degradó a tormenta tropical el viernes tras tocar tierra en la Riviera Maya de México, donde dejó únicamente daños materiales.
Pero la noche del domingo, en su trayectoria a Estados Unidos, volvió a tomar fuerza antes de ingresar a territorio texano.
Baryl tocó tierra la madrugada del lunes cerca de Matagorda, un balneario localizado en el condado del mismo nombre, al suroeste de Houston, con vientos cercanos a los 130 km/, encuadrándose como un huracán categoría 1 (con vientos de entre 119 a 153 km por hora).
Pero, como estaba previsto, perdió fuerza horas después de entrar en territorio continental.
"Los vientos máximos sostenidos están cerca de 70 mph (110 km/h) con mayores ráfagas", detalló un reporte del Centro Nacional de Huracanes (NHC).
Con esa potencia, pasó de huracán a tormenta tropical. Una última actualización marcaba vientos de 104 km/h.
"Se pronostica un debilitamiento constante y se espera que Beryl se convierta en ciclón postropical el martes", detalló el NHC.
Beryl se desplazaba a una velocidad de 20 km/h y en las próximas horas se prevé que su trayectoria derive hacia el noreste.
-Sin energía-
Las autoridades habían previsto cortes de energía a causa del huracán. La mañana de este lunes, más de 2,6 millones de clientes se encontraban sin luz en Texas, según el sitio poweroutage.us.
El Aeropuerto Intercontinental George Bush de Houston adelantó que varios vuelos estaban siendo cancelados por el mal tiempo. Este lunes, el portal Flight Aware reportaba 1.061 cancelaciones en esta terminal.
Tanto por las marejadas como por las potentes lluvias, los organismos de emergencia mantenían alerta de inundaciones para algunas zonas de Texas, entre ellas Houston, ciudad de 2,3 millones de habitantes, cerca de la trayectoria del ojo del huracán.
Imágenes este lunes de cazadores de huracanes desde la localidad de Sargent, entre Corpus Christi y Galveston, cerca de Matagorda, mostraban casas rodeadas por agua.
Algunas ciudades costeras en los condados de Nueces, donde se encuentra Corpus Christi, y el vecino condado de Refugio, realizaron evacuaciones.
- Rumbo este-
La Casa Blanca sostuvo que supervisa la situación.
Beryl es el primer huracán de la temporada del Atlántico, que va de principios de junio a finales de noviembre, e impresionó a los expertos por la precosidad e intensidad que alcanzó.
Científicos creen que el cambio climático, que provoca mayores temperaturas del agua, favorece estas tormentas y aumenta las probabilidades de que se intensifiquen rápidamente.
U. Schmidt--BTZ