Muere un segundo estudiante herido durante el ataque en una escuela de Brasil
Un adolescente que estaba ingresado tras ser tiroteado por un exalumno de su escuela en el sur de Brasil falleció la madrugada de este martes, informaron las autoridades, confirmando la segunda muerte por el ataque ocurrido el lunes.
El joven, de 16 años, murió en el hospital por "falla múltiple de órganos", informó a la AFP la Secretaría de Educación del estado de Paraná (sur) en un correo electrónico.
El ataque ocurrió en un centro educativo de la región metropolitana de Londrina, una ciudad del interior de ese estado.
El agresor, que ingresó a la escuela con el pretexto de buscar su "historial escolar" y luego abrió fuego, fue detenido.
La primera víctima había sido otra estudiante de 16 años que murió en el lugar, según las autoridades.
La prensa local informó que las víctimas eran una pareja y que el agresor tiene 21 años.
Un segundo individuo de la misma edad, sospechoso de haber colaborado con la organización del ataque, también fue arrestado posteriormente, confirmó el gobierno de Paraná.
La policía está investigando la motivación del atacante, que fue inmovilizado por un profesor.
El docente "había pasado por un entrenamiento reciente y la policía llegó al colegio en apenas tres minutos, lo cual evitó una tragedia todavía mayor", dijo el lunes el gobernador de Paraná, Carlos Ratinho Junior, que decretó tres días de luto en el estado.
Los ataques en escuelas se incrementaron recientemente en Brasil y las autoridades atribuyen ese aumento, en parte, a contenidos de incitación a la violencia que circulan en las redes sociales.
En abril, cuatro niños de entre 4 y 7 años fueron asesinados en una guardería de Blumenau, en Santa Catarina (sur), por un hombre que los atacó con un hacha.
Los asesinatos conmocionaron al país y el gobierno federal anunció medidas de regulación de las redes sociales para combatir las crecientes amenazas contra escuelas.
El peor ataque registrado en un centro educativo en Brasil se produjo en 2011: 12 niños murieron cuando un hombre abrió fuego en su antigua escuela infantil en Realengo, un suburbio en Rio de Janeiro, antes de quitarse la vida.
O. Joergensen--BTZ