La UEFA, tras su investigación, desmonta las cifras del ministro francés en la final de la Champions
La UEFA, que comenzó su investigación sobre el fiasco de seguridad de la final de Liga de Campeones, habló este martes del caos ligado a "causas múltiples" en el Stade de France, desmontando delante del Senado francés las cifras sobre entradas falsas que fueron realizadas por las autoridades francesas.
Cuando el ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, había mantenido ante los senadores la cifra controvertida de "35.000 aficionados" con entradas falsas o sin entradas, un responsable de la UEFA, instancia organizadora de la Liga de Campeones, desmintió este total.
"Sabemos que alrededor de 2.600 entradas llegadas al control eran falsas", dijo Martin Kallen, director general de UEFA Events, filial de la instancia europea encargada de las operaciones comerciales de eventos.
"Pero muchas de las entradas falsas no llegaron a las máquinas de control (...) ¿Cuántas? No sabemos, no pudimos verificar. No creemos que sea la cifra mencionada en Francia tras el partido, es decir más o menos entre 30.000 y 40.000", señaló, añadiendo que "varios miles de entradas eran falsas".
En las horas posteriores a esta final entre Real Madrid y Liverpool (1-0), Gérald Darmanin había colocado a los aficionados británicos como responsables de los incidentes, hablando de "fraude masivo" en la billetería y suscitando el enfado de las asociaciones de aficionados.
Ante los senadores, el 1 de junio, el ministro de Interior admitió su mea culpa en la organización de la final en su audición, aunque manteniendo su versión controvertida sobre el número de entradas falsas.
Aficionados de Liverpool y Real Madrid deben ser escuchados por el Senado francés este martes a las 16h30 (14h30 GMT).
Escuchado este martes por la mañana por los senadores, Martin Kallen habló sobre el rol en esta final de la UEFA, que controla en particular la billetería.
Para el dirigente suizo, las entradas impresas, más fácilmente falsificables, eran menos oportunas que las electrónicas. Pero "no fueron solo las entradas en papel las que crearon el caos ante las puertas", señaló.
"Las causas son múltiples: huelga de transportes, malas reacciones de los trabajadores del estadio y de las fuerzas del orden, hubo delincuentes (en el perímetro del estadio), un flujo extremadamente grande en el estadio sin entrada o con entradas falsas", añadió.
Precisó que la UEFA va a tomar "algunas medidas" que comunicará ulteriormente, tras la investigación independiente que pidió a finales de mayo, que comenzó "esta semana" y que podría presentar sus conclusiones en septiembre.
K. Berger--BTZ