El "financiero" del genocidio de Ruanda irá a juicio en La Haya en septiembre
El presunto "financiero" del genocidio de Ruanda de 1994, Félicien Kabuga, empezará a ser juzgado en La Haya el 29 de septiembre, acusado de genocidio y crímenes de lesa humanidad, anunció este jueves un juez de la ONU.
Kabuga, que era uno de los fugitivos más buscados en el mundo, fue detenido en mayo de 2020 cerca de París, después de 25 años prófugo, y fue transferido a La Haya.
Se le acusa de haber participado en la creación de las milicias hutu Interahamwe, las principales fuerzas armadas del genocidio de 1994 que causó 800.000 muertos según la ONU, sobre todo entre la minoría tutsi.
"La sala ordena que el juicio comience en la sucursal de La Haya con los alegatos iniciales el 29 de septiembre (...) y que los testimonios empiecen el 5 de octubre", indicó el juez Iain Bonomy del Mecanismo Residual Internacional de los Tribunales Penales.
Con un traje oscuro, corbata negra y camisa blanca a rayas, el octogenario escuchó atentamente a través de unos auriculares. Fue llevado a la sala en silla de ruedas.
En un principio estaba previsto que compareciera ante el tribunal de Arusha, que cuenta con una rama de los Mecanismo de Tribunales Penales Internacionales (MTPI), pero los jueces decidieron que permaneciera en La Haya.
Sus abogados intentaron detener el proceso por motivos de salud, pero los jueces estimaron en junio que era apto a ser juzgado.
Bonomy precisó que el acusado comparecerá "tres veces a la semana durante dos horas cada día".
Kabuga está recluido en la unidad de detención del tribunal, a pocos kilómetros de distancia.
Se le permitirá asistir a las audiencias a través de videoconferencia si es necesario, dijo el juez.
Kabuga escuchó inmóvil, pero dijo a Bonomy que quería cambiar de abogado cuando se le preguntó si deseaba dirigirse al tribunal.
- Años prófugo -
Su abogado, Emmanuel Altit, declaró a su cliente inocente en su primera comparecencia en La Haya en noviembre de 2020.
Kabuga se enfrenta a seis cargos, entre ellos uno de genocidio y tres de crímenes contra la humanidad: persecución, exterminio y asesinato.
La ONU afirma que 800.000 personas fueron asesinadas en Ruanda en 1994 en una matanza de 100 días que conmocionó al mundo.
Kabuga, aliado del entonces partido gobernante de Ruanda, supuestamente ayudó a crear el grupo de milicias hutu Interahamwe y la Radio-Televisión Libre de las Mil Colinas (RTLM), cuyas emisiones incitaban a matar.
La RTLM también identificaba los escondites de los tutsis, según los fiscales en el acta de acusación.
Más de 50 testigos comparecerán en el juicio.
Los fiscales aseguran que Kabuga controlaba el contenido de las emisiones de la RTLM y daba las órdenes, incitaba, concebía, facilitaba y no tomaba medidas para impedir estos mensajes de odio.
Se le acusa también de haber contribuido en la compra masiva de machetes que fueron distribuidos a los milicianos, bajo la orden de matar a tutsis.
En julio de 1994 Kabuga se refugió en Suiza antes de ser expulsado, y luego se trasladó temporalmente a Kinshasa. En 1997 fue localizado en Nairobi, pero logró escapar de una operación destinada a detenerlo, y a otra en 2003, según la oenegé especializada TRIAL.
Según las autoridades francesas también vivió en Alemania y en Bélgica. Estados Unidos había ofrecido una recompensa de cinco millones de dólares por su captura.
A. Madsen--BTZ